El agua de mar como terapia intravenosa
La terapia con agua de mar por vía intravenosa, también conocida como suero marino o plasma marino, es una práctica terapéutica utilizada en medicina biológica y natural. Su objetivo es remineralizar el cuerpo, favorecer la regeneración celular, apoyar el sistema inmunológico y mejorar el estado general del organismo. Aunque es una técnica relativamente sencilla, debe realizarse siempre bajo supervisión profesional. A continuación se explican los pasos básicos para preparar una intravenosa con agua de mar pura.
Paso 1: Conseguir el plasma marino en frasco de vidrio
El primer requisito es contar con plasma marino hipertónico o isotónico, envasado en frascos de vidrio de calidad certificada. Es importante que el producto sea apto para uso terapéutico, sin contaminantes ni manipulaciones.
El frasco debe mantenerse cerrado hasta el momento de la preparación para conservar la esterilidad del contenido. Revisa la fecha de caducidad y asegúrate de que el envase no esté dañado ni expuesto a temperaturas extremas.
Paso 2: Recolectar el plasma marino con una jeringuilla estéril
Una vez que se abre el frasco de vidrio, se debe utilizar una jeringuilla estéril para extraer la cantidad necesaria de agua de mar. La dosis debe ser recomendada por un profesional de la salud, ya que puede variar según la edad, el peso y la condición de la persona.
El procedimiento debe realizarse en un entorno limpio para evitar cualquier tipo de contaminación. No se deben reutilizar jeringuillas ni introducir objetos no estériles en el frasco.
Paso 3: Aplicación lenta y controlada
La administración del agua de mar debe hacerse exclusivamente por un profesional capacitado, utilizando una vía intravenosa con mariposa o equipo similar. La velocidad de goteo debe ser muy lenta, idealmente unas dos gotas por segundo, para permitir que el cuerpo asimile los minerales de forma progresiva y segura.
Una aplicación demasiado rápida podría causar molestias o reacciones indeseadas, por lo que el control del ritmo es fundamental. Durante el proceso, el profesional debe estar atento a cualquier señal del cuerpo y detener la aplicación si es necesario.
¿Para qué sirve esta terapia?
La intravenosa de agua de mar puede ser utilizada como complemento en tratamientos de:
- Fatiga crónica o debilidad general
- Estados de desmineralización o deshidratación celular
- Problemas digestivos o inflamatorios
- Recuperación postquirúrgica o tras enfermedades prolongadas
No reemplaza tratamientos médicos convencionales, pero puede ser una herramienta útil dentro de un enfoque integral de salud natural.